Pensamientos para la vida

La vida tiene múltiples perspectivas y, de hecho, la podemos observar, comprobar y ver desde tantos lugares y opciones de vida como se nos ocurran. ¿Qué es lo que importa en la vida? Sin duda cada uno de nosotros puede responder a esa pregunta de manera diferente, ¿no crees?

Por lo tanto creo que esa es una gran pregunta. Otra pregunta puede ser, ¿para qué estamos aquí? ¿Hay un porqué de estar aquí, o es puro libre albedrío de la naturaleza? Esa es otra buena cuestión, porque según cómo interpretemos y respondamos a estas preguntas tendremos un comportamiento en la vida, u otro.

Pensamientos para la vida

Pienso que en la vida ante todo tenemos libertad de elección. La libertad de elegir qué queremos hacer en ella. La libertad de elegir, también, qué queremos hacer con ella. Esto significa, ni más ni menos, como digo, que podemos elegir con qué filosofía de vida afrontar el regalo más grande que nos podían dar, y cómo de lejos queremos llevar nuestra propia filosofía de vida o, dicho de otro modo, hasta qué extremo.

Pero hay cosas que desde mi punto de vista están por encima de otras. No es cierto, pienso y me atrevo casi a afirmar, que todos los valores, todas las ideas de la vida valgan lo mismo, que tengan el mismo valor.

Por ejemplo, la necesidad de hacer bien incluso cuando nos hacen mal es una perspectiva que podemos tener muy en cuenta. Esto por supuesto no implica ponerlo fácil para que nos den duro donde nos duele. No se trata de buscar dolor, en todo caso sí se trataría de mirarlo de frente, de plantarla cara, de no huir de él.

Perspectivas

Significa, tan sólo, no devolver ese mal con el que algunas personas, cuanto menos equivocadamente, nos retribuyen. Porque muchas de las personas que nos hacen mal no lo hacen siempre porque sean intrínsecamente malas, pero sí porque están muy equivocadas. Por lo tanto si nosotros, parece, tenemos algo más de cordura, lo cuál no deja de ser una suerte, ¿por qué íbamos a pagarles con la misma moneda?

Es muy importante esto último, porque si no paramos el ciclo del mal por algo de bien, nunca lograremos nada valioso en la vida ya que, de hecho, precisamente de las cosas más difíciles que hay en el mundo, una de ellas es esa. Para eso está el camino espiritual, que es el que responde a prácticamente todos los pensamientos que podamos tener sobre la vida.

De modo que con lo que quiero concluir este artículo es que es en esta búsqueda de las preguntas últimas de la vida, de lo esencial que como decía Albert Einstein, es simplemente invisible a los ojos, encontramos los mejores pensamientos para la vida. Pensamientos que nos iluminan y no que nos dan más oscuridad. 

Pensamientos que nos despiertan, y nos hacen afrontar la vida con más viveza y, a la vez, aplomo. Con mayor candor.